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¿Y tú para cuándo, papá?00:00:10
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Los testigos de Jehová
le hablaron a mi familia00:00:18
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hace algunos años.00:00:19
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Rachel empezó a estudiar primero.00:00:22
00:00:22
Y poco después,
todos los demás.00:00:25
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Por primera vez
estábamos aprendiendo00:00:27
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lo que de verdad enseña la Biblia.00:00:30
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En poco tiempo
ya les estábamos enseñando00:00:33
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las verdades bíblicas a otros.00:00:35
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Bueno... mi familia lo estaba haciendo.00:00:38
00:00:39
No es que dudara
de que esta es la verdad,00:00:42
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pero me daba miedo fallarle a Jehová.00:00:45
00:00:49
¡Largo de aquí!00:00:50
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¿Y si los decepciono a todos?00:00:55
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¿Y si decepciono a Jehová?00:00:59
00:01:14
¿Puedes darme un momento,
por favor?00:01:16
00:01:16
Sí, claro.00:01:16
00:01:16
—No hay problema.
—Muy bien.00:01:17
00:01:19
Ben, un anciano amoroso,00:01:21
00:01:21
—notó que algo me pasaba.
—¿Estás bien?00:01:23
00:01:24
Él me ayudó sin que se lo pidiera.00:01:27
00:01:27
Me preguntó: “¿Qué fue lo primero
que te atrajo de Jehová?”.00:01:31
00:01:33
Creo que fue saber que Jehová
no nos juzga con dureza,00:01:36
00:01:36
sino que es un Padre amoroso.00:01:39
00:01:40
Ben pensó igual, y dijo:00:01:42
00:01:42
“Si hacemos nuestro mayor esfuerzo
por servirle a Jehová,00:01:45
00:01:45
él se encargará de lo demás”.00:01:47
00:01:47
Me explicó que Jehová
conoce nuestras limitaciones00:01:50
00:01:50
y que no espera que seamos perfectos.00:01:53
00:01:53
Siempre está dispuesto a ayudarnos
porque quiere vernos triunfar.00:01:57
00:01:57
Entonces me leyó Isaías 41:10:00:02:01
00:02:01
“No tengas miedo,
porque estoy contigo.00:02:04
00:02:04
No te angusties,
porque yo soy tu Dios.00:02:09
00:02:13
Yo te daré fuerzas.00:02:15
00:02:15
Sí, yo te ayudaré.00:02:17
00:02:17
¡Ayuda!00:02:18
00:02:18
Con mi mano derecha de justicia,
de veras te sostendré”.00:02:23
00:02:28
No tengo que ser perfecto
para servir a Jehová;00:02:31
00:02:31
solo debo amarlo y confiar en él.00:02:35
00:02:35
De lo demás, él se encargará.00:02:38
Jehová te ayudará
-
Jehová te ayudará
¿Y tú para cuándo, papá?
Los testigos de Jehová
le hablaron a mi familia
hace algunos años.
Rachel empezó a estudiar primero.
Y poco después,
todos los demás.
Por primera vez
estábamos aprendiendo
lo que <i>de verdad</i> enseña la Biblia.
En poco tiempo
ya les estábamos enseñando
las verdades bíblicas a otros.
Bueno... mi familia lo estaba haciendo.
No es que dudara
de que esta es la verdad,
pero me daba miedo fallarle a Jehová.
¡Largo de aquí!
¿Y si los decepciono a todos?
¿Y si decepciono a Jehová?
¿Puedes darme un momento,
por favor?
Sí, claro.
—No hay problema.
—Muy bien.
Ben, un anciano amoroso,
—notó que algo me pasaba.
—¿Estás bien?
Él me ayudó sin que se lo pidiera.
Me preguntó: “¿Qué fue lo primero
que te atrajo de Jehová?”.
Creo que fue saber que Jehová
no nos juzga con dureza,
sino que es un Padre amoroso.
Ben pensó igual, y dijo:
“Si hacemos nuestro mayor esfuerzo
por servirle a Jehová,
él se encargará de lo demás”.
Me explicó que Jehová
conoce nuestras limitaciones
y que no espera que seamos perfectos.
Siempre está dispuesto a ayudarnos
porque quiere vernos triunfar.
Entonces me leyó Isaías 41:10:
“No tengas miedo,
porque estoy contigo.
No te angusties,
porque yo soy tu Dios.
Yo te daré fuerzas.
Sí, yo te ayudaré.
¡Ayuda!
Con mi mano derecha de justicia,
de veras te sostendré”.
No tengo que ser perfecto
para servir a Jehová;
solo debo amarlo y confiar en él.
De lo demás, él se encargará.
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